Después de más de una década de haber cerrado sus puertas como la emblemática «Noche Cumbiera» y haberse pasado al mundo del «Rock» en la discoteca más grande de Florencio Varela, la histórica sala de baile, conocida en sus tiempos como Tropicana, La Morena y Reinas, reabrió anoche bajo el nuevo nombre de TropiVarela, un homenaje a la mítica disco de cumbia de zona norte.
Con un aforo que llegó a su capacidad máxima, la discoteca revivió la vibrante atmósfera de los años 90 y principios de los 2000, colmando el espacio hasta su máxima capacidad no solo con varelenses, si no también con público de distintas localidades. La noche estuvo acompañada por reconocidos DJs del mundo de la cumbia, y la temática, similar a la del legendario Tropitango de Pacheco, hizo que la fiesta no decayera en ningún momento. La energía de la pista de baile, junto con el público entusiasta, convirtió la velada en un éxito rotundo. Los gerentes del lugar, de apellido Bartel, se mostraron optimistas y aseguraron a Neo quien fué invitado, que habrá más noches como esta.
El Lado Oscuro: La Controversia de la Reapertura
Sin embargo, no todo fue positivo en la reapertura de TropiVarela. Fuentes cercanas a los asistentes informaron que, en las inmediaciones de la discoteca, se desató una situación complicada relacionada con el estacionamiento. Según testigos, 10 cuadras de autos fueron estacionados por supuestos «trapitos», quienes exigían entre 2.000 y 5.000 pesos por el servicio de vigilancia. Sin embargo, los cuidacoches desaparecieron poco después, dejando los vehículos desatendidos, lo que resultó en el robo de llantas de algunos autos.
Además, vecinos de la zona reportaron incidentes de inseguridad a primera hora de la mañana, cuando el público salía de la discoteca. En la calle, muchos se vieron víctimas de robos de celulares y zapatillas debido a la falta de seguridad en las inmediaciones. La afluencia masiva de personas a la salida, unida a la obligatoriedad municipal de cerrar el boliche en un horario exacto (5:30am), generaba por momentos estampidas que provocó empujones, confusión y algunas peleas entre los asistentes. Los vecinos, aunque conscientes de que este tipo de situaciones suelen ocurrir en discotecas de gran volumen, pidieron a la comuna una mayor presencia de seguridad en las calles en horario de cierre para garantizar la seguridad de los ciudadanos, evitando que los varelenses deban recurrir a otras localidades para disfrutar de una noche de baile o, peor aún, viajar a zona norte.
La reapertura de TropiVarela marcó el regreso de un ícono de la cumbia en la región.